Todo lo que necesitas saber sobre la ceremonia de boda civil personalizada

En España, la única manera de casarse legalmente es ante el alcalde, un funcionario del registro civil o un juez.

Una ceremonia simbólica es a menudo muy similar a las bodas tradicionales. La diferencia es que en lugar de ser una ceremonia legalmente vinculante, es más como una afirmación pública del compromiso de una pareja entre sí.

El nivel de compromiso es el mismo, sólo que sin la ley que lo respalde.

Por eso, antes de la ceremonia, las parejas generalmente se casan primero en su ayuntamiento de residencia.

Luego la ceremonia y la fiesta pueden empezar.

Una ceremonia simbólica os deja mucha más libertad: al no estar regida por ninguna regla, podéis decidir hacer absolutamente lo que queráis.

Una ceremonia simbólica puede ser religiosa o laica, formal y tradicional o suelta y relajada. La composición de la ceremonia dependerá de vuestras preferencias: podréis elegir lo que más os gusta, decidir lo que deseáis en cada paso de la preparación. Sin embargo, el papel del oficiante de la boda será guiaros y aconsejaros.

Aunque una ceremonia simbólica permite la mayor libertad, está claro que sigue estructurada de acuerdo con puntos destacados recurrentes. ¿Cómo podríamos omitir la entrada y salida de los novios, por ejemplo?

La estructura "clásica" es, en la mayoría de los casos, la siguiente:

Una ceremonia simbólica dura un promedio de 45 minutos.

Si llega a una hora, algunos invitados pueden encontrarlo demasiado largo y 30 minutos pueden parecer cortos.

Tres cuartos de hora desde la instalación de los invitados hasta la salida de los novios es un buen compromiso para asegurar que todos se diviertan sin aburrirse. Y no olvides que probablemente no quieras quedarte delante de todos durante una hora u hora y media ...

Un discurso que no exceda los 5 minutos es ideal.

Esto puede parecer largo cuando se trata de un discurso, pero no olvidéis que la persona debe levantarse, ponerse en su sitio, posiblemente presentarse, decir su discurso, y besar a los novios. Todo esto toma tiempo, así que no minimicen la duración de cada discurso, a riesgo de hacer la ceremonia demasiado larga.

Así que aseguraos de pedir a vuestros oradores que limiten su texto a 350-450 palabras.

Generalmente sugiero un máximo de 4 discursos.

Si se respeta la regla de los 5 minutos, esto significa que las intervenciones durarán un total de 20 minutos, que es casi la mitad de la ceremonia. Es perfecto, pero no hay que ir más allá, o se corre el riesgo de tener redundancias en los textos y discursos o de tener una ceremonia un poco larga.

Tened en cuenta que queremos captar la atención de cada invitado y que una ceremonia perfecta es una ceremonia bien programada.

Una vez más, hacéis exactamente lo que queréis. Si sois dos grandes sentimentales que queréis declarar vuestro amor el día que lo celebréis, no os detengáis. Y a la inversa, si sois más modestos, nada os obliga a difundir vuestros sentimientos en público. También podéis decidir decir una parte de vuestros votos durante la ceremonia y luego encontrar un momento en un tete-a-tete para compartir una hermosa declaración de amor.

Los votos de los futuros novios pueden ser idénticos y en este caso, cada uno repetirá una frase que habréis escrito o elegido juntos. También pueden ser escritos aparte. De nuevo, no hay reglas.

Aquí hay algunos consejos para ayudaros a escribir vuestros votos...

Los rituales son actos simbólicos que marcan la ceremonia.

Hay docenas, que podéis crear, copiar o adaptar según lo que os toque. Puede consistir en plantar un árbol como signo de vuestro amor, atar un lazo alrededor de vuestras manos ( es decir, "handfasting"), crear un cóctel cuyos ingredientes representen vuestros rasgos de carácter, etc.

Sin embargo, nada requiere que elijáis un ritual. No olvidemos que el intercambio de votos y anillos ya son rituales en sí mismo, y no menos importantes.

Aquí hay algunos ejemplos de los rituales favoritos...

Una ceremonia simbólica puede tener lugar al aire libre, en la playa, en medio de un olivar o en un destino de ensueño en un país extranjero, incluso un castillo o un viñedo.

En la mayoría de los casos, se celebra en el lugar de la boda, es decir, en el restaurante.

Un oficiante de bodas recomendable y fiable os acompañará durante toda la fase de preparación de vuestra boda.

Como se describe en la página llamada "Un Oficiante de Bodas Consumado", él o ella pasará por todos y cada uno de los elementos y pasos de la ceremonia de vuestra boda, antes, durante y después de la misma.

Para más información, leer "Una Preparación de Boda Perfectamente Coordinada"

Un oficiante es la persona que realiza la ceremonia de la boda. Los oficiantes profesionales, los celebrantes y los ministros interreligiosos están capacitados para crear ceremonias personalizadas para parejas de todos los orígenes.

Pero un buen oficiante de bodas es de mente abierta y está dispuesto a trabajar estrechamente con vosotros para crear el tipo de ceremonia que realmente queréis.

Por lo tanto, tenéis que sentiros cómodos con el oficiante de bodas que elijáis. Como él o ella será la persona que hablará por vuestra pareja, es importante sentir que podéis hacer un gran trabajo juntos.

El coste de una boda en España depende de si la quieres en Valencia o en Madrid. Los gastos de la boda en España van de 12.000 euros a 21.000 euros para 100 invitados.

El coste medio de una boda en España es de 16.500 euros.

Dependiendo de cuánto valoréis vuestra ceremonia de boda, encontraréis diferentes tipos de oficiantes de bodas.

Para simplificar las cosas, diré que hay 3 tipos de oficiantes de bodas, y por supuesto, 3 rangos de precios.

• Menos de 300 euros

• De 300 a 700 euros

• De 700 a 1.500 euros

Para entender mejor lo que justifica esos precios, leed esto...

Tan pronto como haya elegido el lugar y la fecha, debéis buscar al oficiante de bodas que se ajuste a vuestras expectativas.

De hecho, cuanto antes empecéis a trabajar con el oficiante de bodas, mejor podrá aconsejaros y acompañaros durante toda la fase de preparación.